Teherán, Irán. IRNA. 3 de agosto de 2007
Nacional. Internacional. Política.
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha declarado que con el plan de EEUU para la venta de armas por valor de miles de millones de dólares a algunos países árabes de la zona se propone evitar el progreso de la influencia de Irán, por lo que aseguró que dicho plan está condenado a un “fracaso seguro”, apostillando que “los norteamericanos han llegado al final de la línea y, con esta clase de actuaciones primitivas no llegarán a ninguna parte.”
Ahmadineyad, que ha hecho estas declaraciones ante la prensa de Argelia, a tres días de realizar una visita a este país árabe, ha añadido: “El resultado de esta manera de proceder de los norteamericanos será el del fracaso seguro, al igual que sus planes anteriores por cuanto esta forma de comportarse es la de hace 200 años y ya hoy carece de eficacia.”
“Esta no es la primera vez que Washington le vende armas a países de la zona. En los últimos 20 años han vendido en la región armamento por un valor de más de 400.000 millones de dólares”, recordó.
“Todos los esfuerzos de EEUU se centran en sembrar la discordia entre nuestros hermanos en los países musulmanes para así hallar la ocasión de imponer sus puntos de vista y su soberanía en la región”, sentenció.
El mandatario del país persa quiso dejar claro no estar preocupado por esta venta de armas, por tener la república islámica unas “relaciones fraternales con los países de la zona”, y arguyó que esta venta se debe a que EEUU siente que sus relaciones con dichos países se ha visto mermada y que con ella quiere darle pábulo.
“Nuestra recomendación a los países de la zona es que no desperdicien los recursos de sus pueblos, los cuales pueden poner al servicio del progreso y del avance de sus países”, aconsejó.
Ahmadineyad, que también ostenta la presidencia del Consejo Superior de Seguridad Nacional postuló que, para afianzar Israel, EEUU intenta alterar en la región la balanza de amistades y enemistades “presentando como amigos a los enemigos principales de los pueblos árabes y, viceversa, presentar a Irán como el enemigo, cuando es hermano y el mejor amigo de las naciones árabes.”
